Cómo limpiar una fosa séptica

Las fosas sépticas cumplen una función esencial en toda red de saneamientos cerrada, ya que se encargan de recoger las aguas residuales, almacenarlas y procesarlas. Este tipo de sistema, muy usado en viviendas e inmuebles que no tienen acceso a un sistema de alcantarillado, tiene múltiples variantes que permiten procesar los residuos de una forma u otra. Sin embargo, todas ellas necesitan limpiezas periódicas para asegurar su funcionamiento y evitar colapsos y atascos que afecten al resto de la red de saneamiento.

Proceso de limpieza de una fosa séptica

El proceso de limpieza de cualquier fosa séptica sigue un estricto protocolo para el cual es necesario contar con el equipo y los medios adecuados ya que se está tratando con residuos tóxicos que necesitan ser procesados de la forma adecuada. P

El primer paso para limpiar una fosa séptica consiste en vaciar todos los residuos acumulados. Para ello se emplean camiones cuba con sistemas de absorción que permiten retirar todos los residuos y los sedimentos acumulados en el fondo. Gracias a estos sistemas de gran potencia se pueden extraer todos los residuos de forma rápida y eficiente.

Una vez vaciada, se procede a la limpieza mediante agua a presión. Este método permite eliminar los residuos adheridos a las paredes internas de la fosa séptica así como en las vías de entrada y salida. Cuando se ha terminado, se emplean los sistemas de absorción para retirar el agua restante y se deja la fosa séptcia completamente vacía.

Tratamiento de residuos

Una vez finalizado el proceso de limpieza de la fosa séptica, se transportan los residuos extraídos a centros especializados para su tratamiento. Para ello se emplean los camiones cuba de gran capacidad.

De esta forma, se consigue mantener una fosa séptica en perfectas condiciones de uso, alargando su vida útil y evitando problemas en la red de saneamiento.